Se considera, en general, que los hornos de empuje y los hornos de rodillos son hornos de alto rendimiento porque es posible repetir de forma constante los ciclos del horno de cámara.
La productividad y los resultados constantes son inigualables. La duración y la eficacia de los sistemas de control permiten garantizar resultados con variaciones insignificantes y son muy apreciados en la industria de automoción.